La provincia de La Pampa, recibe su autonomía en 1952, siendo hasta esa fecha "territorio nacional", dependiendo directamente del Poder Ejecutivo Nacional, quien designaba sus autoridades. Hasta finales del siglo XIX fue ocupada por los indios ranqueles y territorio de paso de las grandes invasiones de mapuches que asolaban la provincia de Buenos Aires, robando ganado y secuestrando mujeres y niños, en los denominados "malones". Antes de recibir alguna crítica, por haber dicho invasiones, tengo claro que los invasores eran los blancos (huinca en lengua aborigen), pero esa era la dinámica de la época. La ocupación militar trajo la necesidad de "colonizar" los nuevos territorios y se apeló a la inmigración de grandes contingentes de europeos, básicamente españoles, italianos, franceses y los ya citados alemanes del Volga y judíos del este de Europa.
Esto hace que la antigüedad de las poblaciones sea de escasamente un siglo. La proximidad de la vivencia de los primeros pobladores, hace que sus historias hayan sido contadas en primera persona a los actuales habitantes, que son nietos y bisnietos de ellos.
Tras la ocupación militar se extendieron las vías férreas y al costado de ellas aparecían las estaciones que permitían transportar las grandes cosechas a los puertos de Buenos Aires y Bahía Blanca. Rápidamente, esas estaciones nucleaban nuevos pueblos. El pasado 14 de noviembre uno de esos primeros poblamientos cumplió sus 101 años y pude leer en un suplemento periodístico la breve historia. A los fértiles campos de abundantes pastizales se agregaba que el agua se encontraba a escasos 5 metros de profundidad. La primera escuela con 30 alumnos se inauguró en 1916. Uno de los comercios mas antiguos es la carnicería y fabrica de chacinados "Los Gallegos", ya que los abuelos de su fundador es nieto de españoles emigrados. Esta variedad de orígenes, no es obstáculo para que cada uno de los pampeanos sienta un vínculo muy fuerte con su provincia y el país. Quizá la reciente y dura lucha colonizadora les potencie el sentido de pertenencia a esa tierra, aunque es de destacar, que los argentinos manifiestan un notable sentimiento de nacionalidad.
También durante mi estadía, el Banco Mundial, dio a conocer los datos de crecimiento de la clase media en Sud América, siendo para Argentina la cifra mas alta, ya que duplicó en diez años ese segmento de población, pasando de 9,3 millones de personas en 2003 a 18,6 millones en 2010, significando el 3o% de la población del país..
En toda la región el salto fue de 103 millones de personas a 152 millones.
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